sábado, 5 de enero de 2013

IMPRONTA




A Francisco Peralto y Francisco Pino
A Antonio López, in memoriam



Sé que la impronta que deja mi mano
en este papel será, a pesar de su fragilidad,
más duradera que mis pensamientos.

Sé que si este papel va a amorosas manos
durará más que mis escasas primaveras.
Sé que las manos se mutan con sus trabajos
y sus heridas.
Sé, también, que las manos se ennoblecen
cuando encuentran a otras cálidas, firmes,
decididas, suavemente amables.
Sé que las manos pueden ser fácilmente
dos palomas.
Sé, también, que las manos pueden ser brutales.

He educado a mis manos más para la caricia
que para el golpe.
He querido que se condujeran
por vías nobles y hermosas.

Mano hermosa en su vuelo fue mi voz,
espeso fuego palpitó en mi corazón
por latir tan deprisa.
La longevidad es para corazones lentos.

Tú, cuyos ojos están ante esta impronta,
considera que mis manos fueron parte
del vuelo de mis pensamientos,
que ya no existen, que no oyes
sino en la pálida voz de esta tinta
que va degradando el tiempo.



Alcanar, 3 de enero de 2013


Tomàs Camacho Molina

1 comentario:

Tomàs Camacho dijo...

Quiero que el primer post del año sea para el recuerdo del amigo que nos dejó hace un mes, porque hay versos que son para él.